lunes, 27 de febrero de 2012

SOFTWARE UN ELEMENTO CLAVE EN LA INFRAESTRCUTURA TECNOLÓGICA


Otro reto importante, cuando se habla de la infraestructura tecnológica hace referencia al software o programas que se deben usar en las diferentes aéreas de la empresa, dentro de esto hay varios elementos a tener en cuenta:

Sistema Operativo o Motor central para administrar los computadores, en este rubro la oferta se centra principalmente en Windows de Microsoft o Linux software libre, a pesar de compartir los conceptos de estas dos opciones, muy buenas ambas, personalmente me inclino por el software licenciado por aquello del respaldo. Pienso que cuando se paga se tiene derecho a exigir, en este caso hay alto costo de licenciamiento y bajo costo en servicio de valor agregado, pero es igualmente valido usar herramientas libres, en donde el costo se traslada del licenciamiento a los servicios de valor agregado.

 Lo cierto es que Windows es dominante ya que tiene alrededor del 90% del mercado, razón por la cual hay más oferta de valor y software complementario sobre esta plataforma. Estas plataformas también administran las redes de datos, y conviven naturalmente con las Bases de Datos que ofrece el mercado, luego cualquiera es una buena opción, el gran problema hace referencia a la obsolescencia derivada del desarrollo permanente y acelerado de estos sistemas, entonces el costo que se debe asumir por estar migrando de una versión a la otra es alto, no sólo por la inversión en licenciamiento, sino por el traumatismo que implica mover todo a los nuevos sistemas, volver a capacitar la gente y estabilizar el funcionamiento, de ahí que mi consejo sigue siendo el mismo: tercerizar de tal manera que proveedores de infraestructura más expertos en estos cambios sean quienes se encarguen de ello y nos den la garantía de continuidad sin importar qué tanto cambien estos sistemas. En este caso, así como me inclino por tercerizar la infraestructura en centros de datos, éstos deberían incluir también el suministro de los sistemas operacionales asociados a esos computadores ofrecidos.  

Herramientas de oficina esto hace referencia a los procesadores de texto, hojas electrónicas, sistemas de presentaciones, etc., rubro en el cual existe la oferta de Microsoft-Office y otras tantas en software libre, aquí también prefiero inclinarme por el estándar del mercado, pero son igualmente válidas y útiles las otras ofertas. Lo que hay que tener claro es que hoy una Pyme no sobrevive sin estas herramientas que son absolutamente indispensables. Aquí también se enfrenta el problema de obsolescencia, pero se puede programar con más tranquilidad la transición de una versión a la otra e inclusive se puede usar una versión vieja por mucho tiempo, obteniendo prácticamente los mismos niveles de productividad, ya que el uso que le da la Pyme es muy básico, por lo que las nuevas versiones no aportan grandes ventajas como para justificar su cambio acelerado. Sin embargo, es bueno pensar estar siempre en lo último, en caso de escoger la opción de arrendar los computadores, lo ideal es que en el computador el proveedor también incluya las herramientas de oficina.

Herramientas de comunicación: en este rubro hay dos elementos fundamentales:
El primero es un navegador para internet, aquí igualmente hay una oferta estándar de Microsoft que es Explorer, pero hay otras ofertas que están siendo protagonistas en el mercado, donde es difícil encontrar diferencias fundamentales, opciones como Zafari, Crome y otras, prestan el mismo servicio con mucha eficiencia, lo único que haría diferencia es que si el resto de la plataforma es Microsoft seguramente es mejor que todo sea en la misma línea. 

El segundo elemento es la herramienta para correo electrónico, aspecto en el que la oferta es muy variada y donde definitivamente lo mejor es tenerlo fuera de la oficina con opciones desde gratuitas como Yahoo, Hotmail, Gmail, etc. , hasta opciones pagas con estos u otros proveedores que ya dan la opción de manejar un dominio propio, es decir, cuando se elimina el apellido, por ejemplo gmail por el nombre de la empresa. En este factor mi consejo es que nunca piensen en montar el motor de correo en la empresa sino que opten por soluciones en la nube o administradas por otros en el mundo de internet para la administración del correo, de tal manera que tenga acceso desde cualquier computador o dispositivo inteligente desde cualquier parte. 

Aplicaciones empresariales, quizás en el que más cuidado hay que tener en el momento de optar por soluciones reales y efectivas para la empresa. En este rubro hay varias cosas a resolver: soluciones para la parte financiera y administrativa, soluciones para la administración del recurso humano, soluciones para la gestión de procesos, soluciones para la gestión de relaciones con los clientes CRM, soluciones para la gestión de servicio al cliente, soluciones para la administración de la producción, soluciones para la gestión documental, etc., es decir, hay muchas áreas de acción en las que hay múltiples ofertas y grandes beneficios. Aun así no es necesario resolverlo todo de una sola vez, pero sí ir encontrando opciones que hagan que el negocio sea cada vez más productivo y rentable.

 En mi próxima entrega hablaré en detalle de qué y para qué cada una de estas soluciones y qué beneficios traen a la empresa.




martes, 31 de enero de 2012

¿CÓMO ADMINISTRAR EFICIENTEMENTE LA INFRAESTRUCTURA TECNOLÓGICA?

Uno de los aspectos que se han vuelto críticos en las empresas es la administración de las infraestructuras tecnológicas, cada día es más difícil saber qué comprar y cómo configurarlo.

Para nadie es un secreto que los computadores, las redes de datos y las comunicaciones son factores clave de éxito en las empresas, hoy en día no se concibe una organización sin computadores, programas de productividad para manejo de información y acceso a internet.  Normalmente una empresa por pequeña que sea requiere al menos, una herramienta de oficina (Word, Excel o similares), uno o varios correos electrónicos, un software administrativo (contabilidad, facturación, Cartera, Inventario, etc.), un sistema de telefonía interna y externa y comunicaciones móviles (celulares), por no mencionar otros como sistemas para automatizar procesos como las ventas, la cobranza, las compras y pagos, gastos, recursos humanos, etc.
La pregunta es ¿cómo seleccionar esos recursos?, pero más complejo ¿cómo administrarlo para que se garantice el uso permanente y efectivo, poca obsolescencia y alta productividad para la empresa? Lo primero es entender que la plataforma tecnológica no es secundaria sino factor clave de éxito, competitividad y ahorro sustancial de costos de operación, por eso hay que convencerse de que son inversiones indispensables que retornan en mayor rentabilidad, vía los altos índices de productividad que deja en las empresas. Analicemos cada uno de los componentes de la plataforma requerida:
Computadores: este rubro no resulta tan complejo ya que es fácil adquirir en cualquier almacén la última tecnología, lo único que hay que tener en cuenta es la garantía y el respaldo, dónde y quién lo repara y con qué velocidad; en cuanto a capacidad, el mercado siempre está ofreciendo lo mínimo requerido para que las herramientas de productividad funcionen, es decir, en materia de procesadores, memoria y capacidad de almacenamiento, el mercado lo dice, hoy por ejemplo es fácil encontrar que las ofertas hablan de 2 Gigabytes en memoria, procesadores de más de 1,2 MHZ y discos duros de más de 150 Gigabytes, características más que suficientes para que todo lo que normalmente usa una Pyme funcione.
EL PROBLEMA está en cuánto dura esa configuración, por eso es que debemos definir con mucha claridad cuáles son los ciclos reales de uso de esos equipos, es ahí donde hoy debemos convencernos de que los equipos hay que reemplazarlos por mucho cada 2 años, 3 años ya es demasiado pero se puede hacer un esfuerzo. Un grave problema de la PYME es que sigue esperando sacarle de 5 a 7 años a cada equipo, mi consejo es que es mejor depreciar los computadores en 2 años y acostumbrarse a reemplazarlos como ejercicio normal en el presupuesto de la empresa, pero indudablemente LO MEJOR sería no comprar los computadores sino alquilarlos y garantizar una sustitución bianual; hoy ya hay varias compañías que ofrecen esto, así el problema de mantenimiento, seguros, actualización, etc. es de quien sabe cómo hacerlo y que cuenta con las economías de escala para reducir el costo, como lo he mencionado anteriormente es más barato tercerizar que hacer directamente lo que no conocemos bien, por aquello de los costos ocultos que eso implica.
Red de Datos: este sí es un verdadero problema, hay que decidir qué servidor o servidores se requieren, cómo cablearlos, cómo protegerlos, cómo garantizar su permanente acceso. Esto sí es un verdadero dolor de cabeza, ya que la capacidad del servidor depende de qué se montará y de cuántas estaciones se conectarán, definir esto es bien complejo por lo que siempre hay que asesorarse de alguien que sepa de este tema.
Por otro lado, similar a los computadores personales, la obsolescencia de los servidores es muy grande, por esto, sí es indispensable pensar en que hay que reemplazarlos cada 2 años, pero el gran problema es que hay que volver a configurarlos y garantizar trasparencia en el proceso.
Pero si el servidor es un reto importante, las redes también lo son, por la delicadeza y exigencia de la tecnología para que ofrezcan un servicio adecuado, por eso hay que pensar qué tipo de conectores (Switches) usar, cómo cablearlos de tal manera que no se congestionen y garanticen alta calidad en la trasmisión de datos.
Por otra parte,  se enfrentan grandes problemas de seguridad, hay que pensar cómo hacer para que la información no sea vulnerable y  que personas malintencionadas no tengan acceso a la misma, para esto existen protectores (Firewall), pero si se requiere de grandes niveles de protección hay que hacer grandes inversiones en esta materia. Definitivamente en mi entender, en este aspecto específico, lo mejor es tercerizar: contratar servicios de centros de datos (Data Center) y quitarse ese problema de encima, exigiendo altos niveles de rendimiento y seguridad. Con esta opción lo único que hay que garantizar es acceso a internet, cosa que puede ser resuelta con un servidor muy sencillo que distribuya señal a los computadores a través de conexiones, ojalá inalámbricas de alta velocidad; créanme que es lo mejor, porque no importa cuánto se invierta, siempre estará desactualizado y expuesto a grandes problemas de seguridad, ahora, si el temor es garantizar el acceso a Internet, es más fácil y barato contratar una conexión de respaldo que invertir en toda esa plataforma propia.
Programas: Este aspecto lo revisaremos en detalle en mi próxima entrega.

viernes, 13 de enero de 2012

INVERTIR O ALQUILAR, DÓNDE SE PRODUCE MÁS?

Siguiendo en línea con el análisis de aquellas cosas que le quitan valor a una organización, surgen otros elementos que vale la pena revisar en detalle, ya que no solo roban valor la administración de varios aspectos de la empresa como se ha mencionado anteriormente, sino que también la tenencia de algunos bienes hace dispendioso y costoso su tenencia, administración y mantenimiento; por esto hay que tener cuidado a la hora de tomar decisiones de inversión, hay que cuestionarse situaciones como estas:

¿Sera mejor tener oficina propia o alquilarla? En este caso la respuesta no es tan fácil, ni es única, pero sí vale la pena preguntarse en donde produciría más ganancias ese dinero, ¿será que si ese dinero se invierte en materias primas, maquinaria, cartera, desarrollo tecnológico, etc., produce más? Lo que es cierto es que normalmente el dinero produce más si se invierte en la razón de ser del negocio que en finca raíz, pero como mencioné, no necesariamente es una ecuación que se cumpla, porque si hay excedentes de liquidez probablemente esa inversión resulte rentable frente al costo de arrendamiento a pagar.

¿Será mejor comprar vehículos o rentar el servicio de trasporte? Solo pregúntese si su empresa es o no de trasporte y llegará a la conclusión que los costos de rentar estos servicios siempre serán menores que tener los propios, ya que los costos de la operación logística, mantenimiento, tiempos ociosos, procesos de compra, etc., siempre quitaran valor a la organización impidiendo que se concentre y dedique a la razón de ser; valorice cuánto vale el tiempo que se dedica a esto y cuánto tiempo se deja de invertir en lo que sí produce real rentabilidad.

¿Será mejor comprar o rentar equipos de cómputo? Este es un ítem en que siempre resulta más costoso tenerlo que rentarlo, debido al alto nivel de obsolescencia de estas tecnologías y al poco conocimiento que se tiene para definir qué configuración adquirir, definitivamente es mejor entregar esto en outsourcing y/o renting, de tal manera que se garantice que siempre se cuenta con la última tecnología y sobretodo que siempre esté funcionando, recuerde que hoy dependemos 100% de que la tecnología de información funcione efectivamente para que el negocio marche bien, más adelante amplio este concepto.

En conclusión, antes de invertir siempre analice en dónde produce más el dinero y qué elementos quitan valor a la verdadera razón de existir de la empresa, la gran tendencia es a tercerizar y dedicarse a lo que se sabe hacer bien.

En la próxima entrega hablare de cómo gestionar mejor la infraestructura tecnológica en la empresa.

martes, 3 de enero de 2012

HACIA UN CAMINO PRODUCTIVO


Hoy es normal ver que las empresas tercerizan los servicios de aseo, mensajería y vigilancia, pero aún no se ha dado el paso definitivo a la tercerización de servicios como la contabilidad, la cartera, el tele mercadeo, el mantenimiento de equipos, la infraestructura de servidores y datos, la infraestructura física, la administración del recurso humano, el pago de nomina, las compras y otros campos. Afortunadamente cada vez hay más opciones: contadores o bufetes de contadores que ofrecen en outsourcing todos los procesos financieros, compañías que se encargan del mantenimiento de equipos, compañías que ofrecen que todos los servicios relacionados con recursos humanos, Data Centers que hospedan la información con altos niveles de confiabilidad. En fin, existen compañías que ofrecen todo aquello no fundamental del negocio pero que es necesario realizar.
También, y en ausencia de organizaciones sólidas en la prestación de estos servicios, las empresas han optado o pueden optar por otras alternativas muy validas como generar uniones de varias empresas, para compartir estos recursos. Es decir, fortalecen el equipo de staff de una de esas empresas, de tal manera que ese equipo sea quien le maneje esos asuntos al resto de las empresas asociadas. Así profesionalizan el servicio y reducen los costos individuales, no solo por necesitar menos personas, sino por el incremento de la productividad (vía las mejores prácticas), que liberan el tiempo no productivo del resto de los colaboradores.
En conclusión, las empresas deberían enfocarse únicamente en las labores propias de la razón de existir del negocio y delegar el resto de labores, debido a que esas otras tareas les restarán productividad, ya que es como tratar de hacer bien algo para lo cual la empresa no fue creada y de lo que no se tiene un buen conocimiento, si una empresa fabrica zapatos, o vende empanadas, o comercializa papeles, no importa lo que haga, ¿qué tiene que ver eso con llevar contabilidades, seleccionar personas, mantener máquinas, pagar nóminas o pagar proveedores? Por eso es mejor dedicar toda la energía a la razón de ser del negocio y entregar a expertos esas labores que al final del camino solo robarán productividad y por ende rentabilidad a las empresas.
Afortunadamente, en la actualidad hay mucho interés por desarrollar este tipo de negocios, por lo que se estima que en el futuro inmediato se crearán muchas empresas de outsourcing en los diferentes ramos, bien sea por iniciativa de los profesionales independientes y consultores o por grupos empresariales que encontrarán en esta opción una buena alternativa de incremento de la productividad y reducción de costos en sus empresas.
Así lo que cobra gran importancia, es saber seleccionar y controlar la prestación de este tipo de servicios y establecer los mecanismos de control que aseguren una buena calidad del servicio.

lunes, 26 de diciembre de 2011

¿CUÁNTO VALE UN GERENTE?

Sólo para inducir la reflexión propuesta en mi anterior post acerca de la conveniencia o inconveniencia de contratar personal de apoyo (en asuntos como llevar libros contables, seleccionar personal, hacer planeación financiera o tributaria, recaudar cartera, hacer tele mercadeo, hacer vigilancia, hacer aseo, mantener equipos, enviar correspondencia, administrar infraestructuras físicas, etc.), es bueno tener en cuenta lo siguiente:
Una hora de un gerente cuesta entre $50,000 y $200.000, y se estima que estas malas prácticas pueden hacer que los gerentes inviertan entre 1 y 2 horas al día resolviéndolas, es decir, que el costo mensual puede ser entre $1’000.000 y 8’000.000. Pero lo que hay que evaluar con más detenimiento es cuánto vale lo que los gerentes dejan de hacer, por invertir ese tiempo en labores que no generan ningún valor. Infortunadamente, la Pyme acostumbra a ver únicamente el costo de lo que físicamente se gira, de aquello que genera salida física de dinero, pero no se da cuenta de cuánto cuesta la falta de productividad de su equipo de trabajo. Se ha demostrado que un gerente talentoso (aun más un emprendedor) es el principal multiplicador de ingresos de una organización, siempre y cuando su dedicación se enfoque en las labores que generan valor. Pero desafortunadamente en las Pymes se ha descuidado esto.
Revisemos y cuantificamos cuanto tiempo gasta el equipo gerencial en asuntos como:
- Revisar cuentas y firmar cheques (con la revisión incluida)
- Revisar nóminas
- Seleccionar personal
- Discutir la confiabilidad de las cifras
Si se evalúa esto con detenimiento, se puede concluir que siempre resultara más económico tercerizar estas labores, ya que el valor que la compañía contratista pide siempre será mucho menor que el que se está consumiendo realmente. Normalmente sólo comparamos el valor del contrato con el valor pagado en nómina de las personas que hacen estas labores, pero olvidamos tener en cuenta el valor del tiempo que otros invierten en soportar la deficiencia de estas labores y lo que se deja de producir por invertir ese tiempo en cosas que no generan valor.
Pero lo más importante es lo que se puede encontrar en el camino porque, por ejemplo, nunca un contador dentro de la empresa podrá reemplazar el talento que pueda ofrecer una compañía especializada que cuente con un equipo de contadores expertos en un área, que sirven a muchas organizaciones similares, que les dan las herramientas para detectar e implementar las mejores prácticas; nunca el departamento interno de recursos humanos tendrá la capacidad de reclutamiento y evaluación que tiene una empresa que se dedica a esto y cuenta con grandes bases de datos y procesos validados y comprobados por muchas empresas; nunca un mini departamento de mantenimiento interno será capaz de implementar las mejores prácticas para garantizar que las plataformas estén al aire con índices altos de buen funcionamiento; nunca será mejor en vigilancia un vigilante que no haya sido entrenado por expertos en el área, que no cuente con apoyo, relevos, recursos adicionales, etc. 
Definitivamente mi consejo es que las Pymes sí deben apostarle a la tercerización de los procesos que no están en línea con la razón de ser de las empresas. Desde luego, hay que tener mucho cuidado en cuanto a la calidad del servicio a contratar; si bien es cierto que existen muchas empresas de outsourcing, la mayoría de éstas están muy enfocadas en atender las necesidades de grandes organizaciones, precisamente porque las pequeñas aun no han entendido que es una muy buena alternativa, pero también es cierto que se trata de una industria que está creciendo vertiginosamente con ofertas de valor cada vez más interesantes. Por esto hay que ser selectivos a la hora de escoger, y buscar las empresas campeonas en su campo.

martes, 20 de diciembre de 2011

APROVECHAR CORRECTAMENTE EL TALENTO



Una reflexión que siempre se plantea un empresario (ya sea el que se inicia o el que necesita consolidar y hacer crecer su organización) es si, realmente, la cantidad de personas que hacen o harán parte de su nomina son necesarias y si sus labores generan un real valor a la operación de negocios.
Es ahí donde es fácil suponer que el grupo de personas que se dedican a labores fundamentales como son: vender, producir o prestar servicios sí generan gran valor, mientras que el resto de personas, a aquellas que se dedican a soportar a los demás en áreas como: administración, contabilidad, cartera, finanzas, recursos humanos, mantenimiento, mensajería, aseo, vigilancia, etc. no se les nota el aporte real de valor, a tal punto que en muchas ocasiones se llega a concluir que son áreas que solo consumen recursos, denominándolas, equivocadamente, como el mal necesario de las organizaciones.
Quiero concentrarme primero en ese segundo grupo de colaboradores para luego hablar acerca de los primeros, que se supone, generan gran valor a las empresas.
Lo único cierto es que sin la participación efectiva de ese grupo de personas, las que soportan el resto de la organización, las empresas no podrían funcionar; el asunto es qué tan eficiente y eficaz es esa labor y si está enmarcada en las mejores prácticas para garantizar altos niveles de productividad.
Si miramos lo que han venido haciendo las grandes corporaciones, muy inteligentemente, es que han ido tercerizando estas funciones, es decir, entregando en outsourcing estas labores a empresas especializadas en cada campo especifico. Comparto esta práctica totalmente porque se ha demostrado que nunca una empresa podrá superar los niveles de eficiencia y eficacia en labores en las que hay otros que solo se dedican a eso; alguien especializado siempre será mejor que cualquier empresa en labores como: llevar libros contables, seleccionar personal, hacer planeación financiera o tributaria, recaudar cartera, hacer tele mercadeo, hacer vigilancia, hacer aseo, mantener equipos, enviar correspondencia, administrar infraestructuras físicas, etc.
La preocupación para el pequeño y mediano empresario es que esa tercerización resulta muy costosa pues se cree que siempre es más económico tener su propio staff y resolver esos problemas en casa, pero lo cierto es que nunca contemplan los costos ocultos que se derivan de las malas decisiones generadas por no contar con la mejor información y por no implementar las mejores prácticas para gestionar todos esos asuntos.
Definitivamente, es imposible que una pequeña o mediana empresa pueda contratar las personas más expertas en cada una de esas áreas, pues el costo sería muy alto dado que el foco de acción para estas personas seria limitado al tamaño de una empresa que, normalmente, tienen pocos empleados y pocas operaciones; es decir, no da para ir al mercado laboral por la gente más experta.
La reflexión que hay que hacer aquí es si con el equipo limitado de personas que se puedan tener se podrá superar la experiencia y bagaje de empresas cuyo propósito central es únicamente ese. Por eso no es raro ver como las Pymes tienen una rotación de personal alta, se enfrentan a mayores riesgos tributarios, paran sus operaciones porque su plataforma física falla, sus cifras están atrasadas, se descuidan obligaciones legales, etc. ¡Y cuánto se desgasta al equipo gerencial resolviendo asuntos que no ocurrirían si se cuenta con una buena gestión administrativa! Por eso es que vale la pena reflexionar sobre cuál es el costo oculto de utilizar tiempo de gerencia para resolver asuntos en los que el staff falla o simplemente no usa las mejores prácticas para hacerlo mejor.
En el próximo post analizaremos con ejemplos concretos este importante asunto de las tareas que complementan y apoyan la razón de ser de una empresa y la conveniencia de encargarlas a terceros expertos, eficientes, eficaces, confiables y menos costosos.

martes, 13 de diciembre de 2011

PRODUCTIVIDAD, CLAVE DE LA RENTABILIDAD

Para nadie es un secreto que el manejo de las empresas ha venido cambiando vertiginosamente en los últimos años, haciéndolo cada día más complejo; la globalización y la incursión de tecnologías de punta en los procesos productivos, logísticos y administrativos, hicieron que cada vez fuera más difícil ofrecer productos y servicios realmente competitivos, en un mercado cada vez más sofisticado. Ese es el tema de mi primer post.
La confluencia de los elementos mencionados ha generado una gran presión para que las empresas busquen por todos los medios incrementar la productividad como factor clave de un óptimo resultado; y para lograrlo no requieren solamente la vinculación de personas talentosas, sino también soportar su operación con herramientas que permitan que ese talento se concentre sólo en labores que generen alto valor a la empresa. Es por esto que el uso de las tecnologías de la información se convirtió en un punto importante en el desempeño de las empresas que le apuestan a la competitividad basados en altos índices de productividad. Lo que buscan es soportarse en mecanismos eficientes de organización y control empresarial que sean lo más livianos posibles, muy seguros y con altos contenidos de información que apoyen y sustenten la toma de decisiones.
En coincidencia con lo anterior, en el mundo moderno la información fluye a grandes velocidades: los medios de comunicación, la internet y los sistemas de información están suministrando grandes cantidades de datos al servicio de cualquier empresa, lo que ha hecho que las tareas de toma de decisiones y los cambios adquieran gran velocidad, trayendo consigo grandes riesgos de obsolescencia, no solo de los productos o servicios que se venden, sino de los procesos que los soportan.
Esta lucha por incrementar la productividad y por ende la competitividad que era, hasta hace algunos años, un problema que preocupaba casi exclusivamente a las grandes corporaciones hoy en día se convirtió también en uno de los derroteros fundamentales de pequeñas y medianas empresas, que ven cada vez más complejo el proceso de acomodarse a las exigencias y retos que exige el mundo moderno.
En las siguientes entregas de este blog, estaré explorando cada uno de los componentes que hacen parte de la problemática real que se vive en el día a día de las pequeñas y medianas empresas, expresando mi opinión sobre lo que, según creo, son las mejores formas para afrontarlo con éxito. Aspiro, al menos, dejar inquietudes acerca de los factores que se deben tener en cuenta, en casi todas las oportunidades, desde el mismo momento en que se crea una empresa. También espero dejar plasmadas algunas ideas que apunten a incrementar la productividad empresarial que, por ende, generará una mayor rentabilidad y, sobretodo, contribuirá decididamente a incrementar la garantía de permanencia en el mercado.